No salves a una mujer que está arruinada.
No trates de salvar a una mujer que está arruinada, eventualmente ella te arrastrará a ti. «Si el barco (tu vida) se está hundiendo tu deber como líder es hacerte cargo de eso.
Como hombres nuestro instinto es el de proteger y proveer, pero los tiempos han cambiado, un hombre sabio controla sus instintos y enfoca su energía en sobre llevar una vida buena.